domingo, 20 de enero de 2013

Acuerdo

Reconocí de inmediato la premura en su mirada a la vez que reconoció sin dilaciones el sosiego de la mía; pensamos, o supongo que pensamos, en lo mismo, mientras nuestros ojos peregrinos intentaban observar lo inobservable; los relatos fantásticos que narraban sobre la existencia de un algo indefinible que moviliza al hombre nos alentaban a la búsqueda. 

Reconocí al instante mi incapacidad de percibirlo, reconoció después su incapacidad de encontrarlo; y cuando al fin entendimos que no había mas que miradas desnudas frente a nosotros que nos intentaban increpar por no ser lo que no sabíamos, lo que no podíamos; reflexionamos, o supongo que reflexionamos acerca de lo mismo; luego cada uno siguió su camino.

lunes, 14 de enero de 2013

Lo que somos


Se me ocurre que a lo mejor no sos vos, ni soy yo. Sino nosotros, todos esos que hemos conocido y que hemos sido. Que sos esas primeras muchachas que me encontré que soy yo mismo, y todos esos otros con los que he vivido y que me han hecho a la manera del escultor ser quien soy.

También pienso que vos no sos vos, si no todos esos que se te han cruzado y con los que has compartido. Y cuando lo veo así, cuando nos veo como el resultado claro de nuestros encuentros, creo que no hay culpas, o que si las hay, no son nuestras.

Creo además que la vida, este remedo de experiencias pueriles y buenas, no es más que la maestra que nos enseña a pensar en nosotros mismos, y la que nos engaña con efímeras miradas de alegría sobre las certezas del mundo.

Un mundo en el que no estamos vos y yo, si no todos, todos esos que hemos sido y que seremos, todos esos que nos habitan y habitamos.